El PSOE reclama que el gobierno se reúna con los vecinos de Contrueces para solucionar los problemas de movilidad

hace 6 años · Actualizado hace 6 años

El Portavoz del Grupo Municipal Socialista, José María Pérez, acompañado del presidente de la Asociación de Vecinos “Los Ríos” de Contrueces, Alejandro Romero, residentes de la zona y los concejales César González y Celso Ordiales, han visitado las obras, ya finalizadas, del barrio en el entorno del camino de los Caleros y carretera del Obispo. Los vecinos no entienden por qué se ha prohibido el paso a través del Camín del Llagar, lo que les obliga a realizar un recorrido de tres kilómetros para acceder a su casas.

El edil socialista ha asegurado que lo que está pasando en Contrueces es “una situación absurda y un ejemplo más de la manera que tiene este gobierno de actuar haciendo oídos sordos a las peticiones de los vecinos y traspasando a los técnicos la responsabilidad de reunirse con ellos y tomar decisiones”. Pérez ha añadido que este es el modus operandi del gobierno de Carmen Moriyón tanto para las obras, la organización del tráfico, el urbanismo y el resto de áreas del ayuntamiento. “Es una muestra más de que el gobierno no quiere ejercer sus funciones y no para de acumular problemas”, añadió.

El edil socialista ha reclamado al gobierno municipal que se siente a hablar con los vecinos para analizar cuál es el problema y que se les dé una solución. “En este caso es bien fácil de arreglar: que se les dé acceso limitado a los vecinos y residentes de la zona por un vial que ya existe, que ya está urbanizado y que, en estos momentos, está limitado al uso de dos negocios”, afirmó Pérez, añadiendo que el uso de los llagares es legítimo, pero que igual de legítimo es darle acceso a los vecinos.

Así mismo, el presidente de la Asociación de Vecinos Los Ríos, Alejandro Romero ha incidido en que, a los vecinos de las calle Santa Primitiva y Santa Irene, y una parte de Carretera del Obispo se les obliga a dar un enorme rodeo para acceder a sus viviendas, a pesar de tener al lado una carretera perfectamente asfaltada, con una circulación muy reducida y que perfectamente podría ser utilizado por los residentes en esas calles.

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